Navidad y mascotas: cómo cuidar su bienestar durante las fiestas

La Navidad es una época muy especial para las personas: reuniones familiares, celebraciones, comidas diferentes, viajes y cambios en la rutina diaria. Sin embargo, para nuestras mascotas estas fechas pueden convertirse en una fuente importante de estrés si no tenemos en cuenta sus necesidades.

Perros y gatos son animales muy sensibles a los cambios. El aumento del ruido, la llegada de invitados, la exposición a nuevos alimentos o la alteración de sus horarios habituales pueden provocarles ansiedad y, en muchos casos, problemas de salud que acaban en consultas veterinarias de urgencia. Por eso, es fundamental anticiparnos y ayudarles a vivir estas fiestas de la forma más tranquila y segura posible.

Alimentación en Navidad: uno de los mayores riesgos

Durante las fiestas navideñas, uno de los motivos de consulta más frecuentes en las clínicas veterinarias está relacionado con el aparato digestivo. Indigestiones, gastroenteritis, intoxicaciones alimentarias, obstrucciones intestinales o incluso úlceras digestivas son problemas habituales en estas fechas.

Aunque pueda parecernos un gesto de cariño, ofrecer a nuestras mascotas comida “especial” o restos de nuestras celebraciones no es una buena idea. Tanto perros como gatos necesitan una alimentación equilibrada y constante durante todo el año, y los cambios bruscos en la dieta suelen sentarles mal.

Alimentos peligrosos para perros y gatos

Muchos alimentos típicos de la Navidad son altamente tóxicos para las mascotas. El chocolate, las uvas, las pasas o las salsas elaboradas con ajo, cebolla o puerro pueden provocar intoxicaciones graves. Los alimentos con alto contenido en grasa o azúcar, además de ser difíciles de digerir, favorecen el aumento de peso y pueden desencadenar pancreatitis.

También es importante evitar el acceso a sobras de comida, especialmente alimentos crudos, que pueden transmitir bacterias como Salmonella o Clostridium, y huesos, que pueden causar fracturas dentales, obstrucciones o perforaciones digestivas.

Otras intoxicaciones frecuentes en Navidad

Durante estas fechas también aumentan las urgencias veterinarias por acceso accidental a medicamentos, alcohol, drogas o plantas decorativas como la flor de Pascua. Este tipo de intoxicaciones pueden tener consecuencias muy graves e incluso ser mortales, por lo que es fundamental extremar la precaución en casa.

Mantener una rutina estable durante las fiestas

Las vacaciones navideñas suelen alterar nuestros horarios, pero intentar mantener cierta rutina es clave para el bienestar de nuestras mascotas.

Paseos, descanso y control del entorno

En el caso de los perros, es recomendable seguir con los paseos diarios. Aunque dispongamos de menos tiempo, es preferible realizar paseos algo más cortos pero con mayor actividad, para que puedan liberar energía y reducir el estrés acumulado.

En casa, es importante ofrecerles un espacio tranquilo donde puedan descansar alejados del bullicio. Un lugar con su cama, su manta, juguetes y agua, al que puedan acudir cuando necesiten calma, les ayudará a sentirse seguros.

Conviene también controlar el acceso a zonas donde puedan encontrar alimentos, regalos, adornos o pertenencias de los invitados, así como vigilar puertas y ventanas para evitar escapes accidentales.

Petardos y ruidos fuertes: un gran desafío para las mascotas

Aunque pensemos que nuestra mascota no tiene miedo a los ruidos, las celebraciones navideñas suelen ser el momento en el que aparecen o se agravan problemas de ansiedad. Petardos, música alta, gritos, portazos o la caída de objetos pueden generar miedo, estrés e incluso fobias.

Señales de estrés y ansiedad que debes vigilar

Algunos signos claros de estrés y ansiedad son los temblores, los lloros, los gruñidos, el babeo excesivo, el deambular constante, el lamido compulsivo o los bostezos repetidos. Aunque pueden ser episodios puntuales, si se repiten con frecuencia es importante consultar con el veterinario.

Crear un espacio seguro y transmitir calma

Es fundamental ofrecer a la mascota un espacio seguro donde se sienta protegida. Este lugar debe ser familiar y conviene acostumbrarla a utilizarlo antes de que aparezcan los estímulos que le generan miedo. En este vídeo, el etólogo Jaume Fatjó explica cómo ayudar a los perros a gestionar situaciones de miedo y ansiedad:
https://www.youtube.com/watch?v=kg6SlIB0jds&list=PL8h-OzJEvZ-RfpMBQ1RPnPd25y-1TpMmV&index

Durante los momentos de mayor ruido, cierra puertas, ventanas y cortinas para amortiguar sonidos y destellos de luz. Puede ser útil poner música relajante de fondo, como la que se muestra en este enlace:
https://www.youtube.com/watch?v=efdNlRxThqw&t=299s

Evita perseguir a tu mascota, sacarla de su escondite o consolarla de forma excesiva, ya que estas conductas pueden aumentar su estrés. Limítate a transmitir calma: especialmente los perros detectan nuestras emociones con gran facilidad y, si te perciben tranquilo, les estarás enviando un mensaje de seguridad.

Consulta con tu veterinario y disfruta de unas fiestas seguras

Cada mascota es diferente y puede necesitar medidas específicas. En algunos casos, el veterinario puede recomendar el uso de feromonas, productos naturales o, si es necesario, tratamiento farmacológico para ayudar a controlar el miedo y la ansiedad.

Con una buena planificación, atención a los detalles y el asesoramiento adecuado, es posible disfrutar de la Navidad sin comprometer la salud y el bienestar de nuestras mascotas. Ante cualquier duda, recuerda que tu clínica veterinaria de confianza está para ayudarte.